Las calderas de gasificación de leña se han creado para la combustión de leña mediante el principio de gasificación de generador haciendo uso de un ventilador exahustor que puede aspirar los gases quemados de la caldera o también introduciendo el aire a la caldera.
El cuerpo de las calderas, por lo general, está elaborado de una pieza soldada de placas de acero de un espesor que va entre los 3 y los 8 mm, que están conformadas por la tolva de combustible que a su vez tienen en su parte inferior un bloque del tipo refractivo con un orificio de manera longitudinal para darle paso a los gases quemados y otros gases.
Por otra parte, la cámara de terminación del quemado, que se ubica debajo de la tolva, posee bloques de cerámica y en la parte posterior de las calderas existe un canal de combustión que en la zona superior posee instalada una válvula de encendido y un tubo de exhausión para la conexión con la chimenea.
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Las ventajas de las calderas de gasificación de leña
Son diversas las ventajas de las calderas de gasificación de leña, veamos algunas de ellas:
- Es posible quemar grandes piezas de leña.
- Posee un amplio depósito de combustible con un tiempo de combustión extenso.
- Elevada eficiencia estimada entre el 81 al 87 % dependiendo el tipo, en donde el aire primario y secundario puede precalentarse para tener elevadas temperaturas.
- El proceso de combustión es ecológico, siendo una caldera conforme las normas internacionales.
- Posee un ventilador del tipo exhaustor con una liquidación de cenizas sin polvo, además de que cuenta con una sala de calderas sin humo.
- Estas calderas cuentan con un bucle de refrigeración ideal para el calentamiento en exceso con lo que no existe el riesgo de dañar la caldera.
- Poseen un sistema de desconexión automática luego de quemar el combustible, además dispone de un termóstato para la salida de los gases quemados.
- Esta caldera posee un sistema de recolección muy útil de cenizas, además de que cuenta con una cámara grande de combustión de cerámica para las cenizas (ideal para ser usada en los casos de utilizar leña y que se limpia una vez en la semana).
- Esta caldera no posee placa tubular por lo que el proceso de limpieza es mucho más fácil
- Sus dimensiones son pequeñas y posee bajo peso.
- Esta caldera es de elevada calidad.
Las calderas de leña y el medio ambiente
Los procesos de combustión inversa, aire de combustión a nivel de precalentamiento y de la cámara de cerámica de combustión que hacen las calderas de leña, logran un proceso de combustión ideal, generando una cantidad ínfima de exhalaciones contaminantes en las calderas de leña, es por ello que las calderas de leña cumplen con los límites para lograr los estándares de calidad en diversos países del mundo.
La instalación de las calderas de leña
Las calderas de leña deben estar acopladas con aparatos especiales tales como el LADDOMAT 21 o incluso con válvula de control térmico del tipo ESBE con el fin de alcanzar la temperatura mínima del agua de reposición a la caldera, que se estima en unos 65C°.
Además, la temperatura de salida de la caldera deberá mantenerse de manera constante en un rango promedio de entre los 80 y los 90 °C., en donde todas las calderas son suministradas en su diseño básico con bucle de enfriamiento, esto con el fin de contrarrestar el calentamiento muy excesivo. Es recomendable instalar las calderas con unos depósitos de acumulación.
La caldera de leña por antonomasia
Se ha comprobado que las Caldera de leña por antonomasia son la opción más rentable para el uso de la leña en materia de combustible.
Como se sabe, la leña es un recurso natural que existe en abundancia en nuestros bosques, es por ello que, si usted habita en una zona muy boscosa, podrá aprovechar los recursos naturales de esa área para poder alimentar tanto la calefacción central como el agua caliente de su hogar lo que generará grandes ahorros tanto en costos como en emisiones de CO2.
Además, estas calderas de leña pueden recibir subvenciones, puesto que son una instalación que se basa en las energías renovables.
Las calderas de este tipo ofrecen una progresión de potencia que va desde los 31 kW hasta los 44 kW con un rendimiento a nivel estacionario real estimado en un 92%.
Estas calderas están diseñadas para quemar leña partiendo del principio de gasificación generadora por medio de un ventilador que puede aspirar los gases quemados de la caldera.
Definitivamente, se trata de una gran alternativa de elevados beneficios para poder calefactar por medio de leña, bien sea dura o bien sea blanda, que se precalienta por medio aire antes de llegar al proceso de combustión.
Cuenta con un tanque de almacenamiento con una capacidad de 170 litros para troncos de incluso de hasta 50 cm de largo que garantiza un tiempo de combustión mucho más extenso.
Por otra parte, estas calderas de gasificación a elevadas temperatura nos brindan diversos elementos en materia de seguridad y de ahorro, con relación a otras calderas de su gama de gran relevancia tales como el disponer de una sonda lambda, que es un tipo de sonda que se instala en el tubo de salida de humos y procede a enviar datos de la configuración de los gases de escape hacia el centro de control con el fin de optimizar la combustión y con ello poder controlar el CO2 que se emite.
Finalmente, otra de las virtudes que posee esta caldera es que cuenta con un sistema de limpieza de cenizas, además de un completo menú de control del tipo electrónico con los cuales se puede configurar y controlar la caldera. Toda una maravilla.